Un día de Santiago en la memoria

Este 25 de julio estará marcado para siempre en nuestras memorias y nuestros corazones, desgraciadamente el día Santiago Apóstol era de todo menos festivo, los medios de comunicación nos mostraban las imágenes de la desolación. La tarde en Oviedo era gris y desapacible, un orbayu fuerte dejaba su huella. A las siete de la tarde en la calle Muñoz Degraín ante la estatua de Santiago se reunían la Cofradía de Santiago Apóstol de San Lazaro del Camino, la Asociación Astur-Leonesa de Amigos del Camino de Santiago y una amplia representación del Ayuntamiento de Oviedo, para hacer la tradicional ofrenda floral que cada 25 de julio realizan y la posterior misa en la iglesia parroquial de San Lázaro del Camino. Sin embargo este año las caras eran otras, las emociones estaban a flor de piel, al recordar en un sentido homenaje a las víctimas de este fatídico accidente.

D.  Javier Sergio Vázquez Álvarez  presidente de la Cofradía de Santiago Apóstol de San Lázaro del Camino,
 presenta la ofrenda floral que se realizará a la estatua de Santiago

Sería D. Celestino Castañón González, quien fuese párroco de San Lázaro del Camino y uno de los impulsores de la Cofradía y la Asociación de Santiago quien comenzase este  sencillo acto ante la estatua de Santiago. A continuación D. Javier Sergio Vázquez Álvarez presidente de la Cofradía presentaría de ofrenda floral con estas palabras:

Las flores son señal de la fragilidad de la vida. Pero también de la felicidad y de la santidad.

En el Cantar de los Cantares, las flores expresan el amor esponsal que une a la comunidad elegida con su Señor. El encuentro de Jesús con María Magdalena en la mañana de Pascua, acontece en un jardín y el Resucitado es confundido con un jardinero.

Este año nuestra ofrenda floral quiere ser también un gesto de condolencia y cercanía a las víctimas y familiares del accidente ferroviario sucedido precisamente en las cercanías de Santiago de Compostela.

El Ayuntamiento de Oviedo, la Cofradía de Santiago Apóstol, y la Asociación Astur-Leonesa del Camino de Santiago, ponemos a sus pies unas flores que expresan nuestra oración al Dios de la Resurrección y la Vida por aquellos que han fallecido.

Niños de la Cofradía, entregan un ramo de flores a Santiago

Después se guardó un minuto de silencio, los niños de la cofradía entregaron el ramo de flores y D. Jaime Reinares Fernández, en representación del Ayuntamiento de Oviedo puso a los pies de Santiago un centro de flores y se rezó una oración al apóstol Santiago.

D. Jaime Reinares y D. Celestino Castañón depositan el centro de flores
del Ayuntamiento de Oviedo por las victimas del accidente ferroviario de Santiago de Compostela

A continuación las personas allí reunidas se desplazaron hasta la iglesia parroquial de San Lázaro del Camino donde tendría lugar la Santa Misa, en la que concelebrarían los dos párrocos de San Lázaro, D. Antonio Nistal Hernández quien es a su vez el Rector del Seminario de Oviedo y D. Diego Macías Alonso Vicerrector del mismo y Don Celestino Castañón González, párroco durante muchos años de esta parroquia e impulsor del Camino de Santiago.

Inicio de la Santa Misa en la parroquia de San Lázaro del Camino

Pero tampoco nuestro arzobispo de Oviedo, D. Jesús Sanz Montes, nos quería dejar sin unas palabras, el mismo estando en Santiago para festejar ese día, se enteró de la fatídica noticia, redactando una carta que nos trasmitió D. Diego Macías al inicio de la Santa Misa.

Estando providencialmente en Santiago de Compostela, con motivo de la predicación del triduo del Apóstol, me he encontrado ante la tremenda noticia de este gravísimo accidente. Me uno al dolor de tantas familias que han perdido a seres muy queridos; también me uno al deseo de restablecimiento de los heridos.

Encomiendo al Señor el eterno descanso de los que han muerto. El Camino de Santiago, sea cual sea su época y su momento, es un camino que siempre tiene meta. Santiago peregrinó al Señor y de Él nos hizo peregrinos. A él encomiendo a los fallecidos, para que, con su intercesión y compañía, hayan llegado hasta el pórtico de la Gloria, que es nuestra meta definitiva en el cielo.

A sus familias y amigos, todo mi afecto y mi plegaria también por ellos. Unido a la oración del Santo Padre, a la oración del Arzobispo de Santiago, al que acompaño, elevo en silencio mi oración y, junto a toda nuestra Diócesis de Oviedo, pido para todos la paz, la esperanza y el consuelo.

Altar mayor de la iglesia de San Lázaro del Camino

Durante la homilía se volvería a vivir un momento emotivo, las palabras de D. Diego, nos hacían ver la fragilidad de la vida, como ya comentaba el evangelio, somos como las vasijas de barro, y nuestra vida hay que vivirla día a día, pues esta vida es un bien prestado.

Finalización de la Santa Misa

Desde aquí queremos acompañar en el sentimiento a todos los familiares de las víctimas del accidente, que tengan fe y esperanza, pues ya son peregrinos con Nuestro Señor en el cielo, apóstoles de Tu Reino. Y también queremos dar fuerza a las personas heridas y sus familiares, para que se recuperen lo antes posible.