Cientos de personas se congregan en la iglesia de Quintes
para despedirse de Almudena Torres en una emotiva ceremonia
18.08.13 LUCÍA RAMOS
«No sabes cómo se nota tu ausencia», afirmaron las amigas de
Almudena Torres, fallecida en la madrugada del jueves a causa de la leucemia.
Las pequeñas protagonizaron uno de los momentos más emotivos del funeral de la
niña, oficiado ayer en la iglesia de Quintes.
Después de ocho meses luchando contra el cáncer, y tras
conseguir que miles de personas se volcasen para apoyar la recaudación de
fondos que iba a costear un tratamiento experimental en Estados Unidos, la niña
de 13 años sufrió una bajada de defensas y no pudo resistir más. No obstante,
la fuerza que siempre mostró y su empeño por superar la enfermedad no han sido
en vano, pues la fundación creada para apoyar su causa, Hermandad por la Vida,
continuará ayudando a niños con cáncer, con ella como madrina.
El adiós más difícil
Las calles de Quintes, donde residía Almudena, no daban
abasto para acoger los coches de los cientos de personas que acudieron a
despedirse de la pequeña. Rápidamente, el lugar se llenó de amigos de la niña,
profesores, compañeros de clase y vecinos que quisieron acompañar a su familia
en el adiós más difícil que existe. Sus hermanos nazarenos fueron los
encargados de llevarla hasta el interior del templo, donde la tristeza era
palpable. «Es difícil asimilar la muerte de alguien que está en la flor de la
vida y que día a día demuestra tantas ganas de seguir adelante», afirmó el
cura, leyendo la mente de los allí presentes.
El sacerdote también quiso destacar el gran número de
personas que a lo largo de estos meses mostraron su cariño y apoyo a Almudena
Torres, cuya lucha servirá de ejemplo para ayudar a otros niños en su
situación.
Nunca perdió la sonrisa
Para cerrar la ceremonia, las amigas de la pequeña quisieron
dedicarle unas últimas palabras. «Nunca podremos olvidarte, porque cuando tú
llegaste, llegó la revolución. Estamos seguras de que allí donde estés,
seguirás revoluciando todo lo que te rodee, siendo la misma de siempre»,
afirmaron. Las jóvenes también recordaron con gran cariño anécdotas vividas con
Almudena y destacaron cómo nunca, ni en los momentos más duros de la
enfermedad, se borró la sonrisa de su cara ni se le quitaron las ganas de bromear.
http://www.elcomercio.es/v/20130818/gijon/sabes-como-nota-ausencia-20130818.html
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