La imagen de María Santísima de la Esperanza, la Esperanza de Oviedo, ha sido ataviada un año más de Inmaculada Concepción, con motivo de la Solemnidad de la Patrona de España que tiene lugar cada 8 de diciembre. La Esperanza de Oviedo, obra del escultor-imaginero D. José Miguel Tirao Carpio, tiene su Capilla, a la que acuden sus fieles devotos, en la Parroquia de San Francisco de Asís (La Gesta).
El encargado de vestir de tan singular y bella forma a la Madre de Dios ha sido D. Ígor Freijoó González, Prioste-Vestidor de la Hermandad y Cofradía de Los Estudiantes, quien ha contado con la colaboración de Dª. Mónica García de la Noceda, Camarera de Nuestro Padre Jesús de la Sentencia.
Hay que destacar que fue el 8 de diciembre de 1.854 cuando el Papa Pío IX, definió el dogma de la Inmaculada Concepción en su bula "Ineffabilis Deus" con las palabras que siguen: “La Santísima Virgen María fue preservada inmune de toda mancha de culpa original en el primer instante de su concepción, por singular gracia y privilegios de Dios omnipotente, en atención a los méritos de Jesucristo, salvador del género humano”. Por lo tanto, Santa María desde el primer momento de su concepción, fue preservada de toda mancha del pecado original, habiendo en ella ausencia de pecado, presencia de la gracia santificante, virtudes y ausencia de inclinación al mal.
Desde el siglo XIV existen en España referencias de cofradías creadas en honor a la Inmaculada Concepción. Entre las más antiguas podemos encontrar la de Gerona, que data del año 1330. En el siglo XVI el fervor a esta advocación creció considerablemente, con un ingente número de cofradías constituidas bajo la advocación de la "Pura y Limpia Concepción de María", siendo hermandades consagradas a las labores caritativas y la asistencia social.
La Solemnidad de la Inmaculada Concepción fue fiesta de guardar en todos los reinos de su Majestad Católica, es decir, en todo el Imperio español, desde el año 1644. Si bien se declaró fiesta de guardar en toda la Iglesia Católica, desde 1708 por orden del papa Clemente XI.
FOTOGRAFÍAS:
ÍGOR FEIJOÓ Y MÓNICA GARCÍA DE LA NOCEDA
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