lunes, 10 de septiembre de 2012

La Virgen de Guía desborda Llanes


La tradición y el buen tiempo arrastran a la villa llanisca a más devotos que nunca para el día grande del bando


La Virgen de Guía a su llegada a la ermita, arropada por una multitud de fieles



9/09/2012 Llanes, Patricia MARTÍNEZ


Una villa desbordada por la afluencia masiva y por la devoción. Así estaba ayer Llanes en el día grande de la Virgen de Guía, una fiesta que en 2016 cumplirá 500 años de tradición. A los cientos de seguidores del bando se unieron innumerables visitantes, atraídos por un espléndido sábado de sol y buenas temperaturas.

La jornada comenzó con una salva de voladores, música y desfile folclórico, a los que siguió la misa en la Basílica. Pasado el mediodía ya había cientos de personas en los alrededores del templo, esperando por la procesión que llevó a la Virgen hasta su capilla. Las aldeanas llaniscas y los porruanos también se contaron por cientos, más de 600 de las primeras y de 800 entre los segundos.

Tanto miembros del bando como simpatizantes y asiduos coincidieron en destacar que había más personas vestidas con el traje tradicional que el año pasado. Una presencia motivada, en parte, por ser día no laboral. En filas de tres, todos acompañaron a la Virgen al ritmo de panderetas, bastones, gaita y tambor.


Las aldeanas esperan la salida de la Virgen para iniciar la procesión


Por el camino, multitud de devotos esperaban con ilusión el paso de la imagen, que a la altura del puente se detuvo entre gran expectación. Los doce hombres que portaban la imagen a hombros la giraron y la Virgen de Guía quedó mirando al mar. La emotividad aumentó al escucharse una sirena de barco y ante la ya tradicional suelta de palomas, cuya explicación se encuentra en el origen que se atribuye a la fiesta.


Cuentan que un grupo de marineros en apuros a causa de una tormenta mientras faenaba en alta mar se encomendó a la Virgen para que los protegiera. Ante ellos apareció una paloma que los guió hasta tierra firme. Pero antes de llegar divisaron una caja flotando en el mar, que ataron a la embarcación. Tras regresar al puerto, descubrieron en su interior la imagen de la Virgen. La comitiva reanudó su marcha en dirección al Campo de la Guía y durante todo el trayecto recibió los gritos de alabanza de miembros del bando de todas las edades. A la voz de «¡Viva la Virgen de Guía!» repetida tres veces, las muestras de devoción se manifestaron cada pocos pasos.


La reverencia de aldeanas y porruanos ante la Virgen de Guía


Uno de los bailes que interpretaron los jóvenes del bando




El camino se hizo duro para algunos por la fuerza del sol en las horas centrales del día, pero mereció la pena. Finalizada la procesión y ya en el Campo de Guía, 22 niños deleitaron a todos los presentes con la danza de arcos, a la que siguió una emotiva reverencia de aldeanas y porruanos a la Virgen. Pero sin duda el momento en que la imagen regresó -de espaldas, como es tradición- a su ermita fue el de mayor sentimiento y emoción de la mañana. En el interior del templo le cantaron la Salve y, una vez fuera, cantaron los ramos, que eran cuatro. A continuación, los jóvenes del bando interpretaron los bailes regionales del pericote, la jota del Cuera, el fandango y el xiringüelu de Naves.


Diario "La Nueva España":
http://www.lne.es/oriente/2012/09/09/virgen-guia-desborda-llanes/1295465.html

No hay comentarios:

Publicar un comentario