Salvados de naufragar gracias a la Virgen del Carmen

En el verano de 1845 el barco inglés el "Rey del Océano" se encontraba, en el verano del año 1845, en medio de un gran huracán. Las grandes olas azotaban al barco sin piedad y el hundimiento parecía próximo. El ministro protestante llamado Fisher, que se encontraba en el "Rey del Océano" en compañía de su esposa e hijos, y otros pasajeros fueron a la cubierta para suplicar misericordia y perdón a Dios. 

Escapulario de Nuestra Señora del Carmen

Escapulario sostenido por Ntra. Señora del Carmen

Entre la tripulación se encontraba el joven irlandés John McAuliffe, que al comprender la gravedad de la situación, abrió su camisa, se quitó el Escapulario de la Virgen del Carmen que llevaba y, haciendo con él la Señal de la Cruz sobre las grandes y furiosas olas, lo lanzó al mar. En ese preciso momento el viento se calmó, sólo una ola más llegó a la cubierta, trayendo con ella el Escapulario de la Santísima Madre de Dios que quedó depositado a los pies del muchacho.

Nuestra Señora del Carmen en La Coruña,  Patrona de los Marineros
(Fotografía: Mario Montero)

Escapulario de la Virgen del Carmen

Fiestas de la Virgen del Carmen en Alicante
(Fotografía: Alicante Vivo)

Durante lo acontecido el ministro protestante había estado observando con mucha atención todas las acciones de John McAuliffe y fue testigo del milagro acaecido. Después, al preguntar el ministro al joven se informaron acerca de la Santísima Virgen y su Escapulario. Este hecho provocó que tanto el  Sr. Fisher como su familia ingresaran en la Iglesia Católica y así disfrutar la gran protección del Escapulario de Nuestra Señora del Carmen.

Fuente: Prensa Católica