Durante los días pasados en Barcelona, la Hermandad de Los Estudiantes de Oviedo ha querido estrechar lazos con una de las cofradías gremiales más antiguas de la ciudad condal, la que pertenece al gremio de zapateros, la Cofradía de San Marcos Evangelista que data de 1202 y que contó con representación en el Consejo de Ciento desde el año 1257, institución ésta, destinada al gobierno municipal de la ciudad de Barcelona entre los siglos XIII y XVIII.
San Marcos Evangelista, en su Capilla de la Catedral de Barcelona |
David Griñó en su libro Oficios que se pierden, nos habla de diferentes aspectos de la historia de este gremio barcelonés: “Hay que remontar a la existencia corporativa de los zapateros al 1202 con la fundación de la Cofradía de San Marcos y desde el 1257 era representado en el Consejo de Ciento, pero las primeras ordenanzas que se conocen corresponden al 1405. A partir
del siglo XV fueron uno de los primeros gremios barceloneses que contaba con
una importante casa gremial. La cofradía de los oficiales zapateros se
constituyó en el siglo XIV, uniéndose con el de los maestros en el año 1390,
pero sin acabar de entenderse y se volvieron a separar en el 1547 hasta el
1618, en que el Consejo de Ciento los abolió, llegando finalmente a la
concordia a partir del 1767. En el 1479 formaron un grupo marginal los
zapateros remendones con la cofradía bajo la advocación de San Crispín y San
Crispiniano, pero faltos de iniciativa legal y con la mísera situación
económica estaban bajo el control del Gremio de Maestros. El año 1623 y el 1670
el Gremio de Maestros zapateros recibió las ordenanzas por que se regía y aun
obtuvo de nuevas en el año 1800. Cuando llegó la supresión del sistema gremial,
los zapateros todavía pudieron superarla y su vida corporativa llegó al siglo
XX”
Casa del Gremio de los Maestros Zapateros, en la Plaza de San Felipe Neri |
D. Igor Freijoó González, prioste y vestidor de la Hermandad de Los Estudiantes, delante de la Casa del Gremio de Maestros Zapateros |
La Casa del Gremio de Zapateros de Barcelona, situada en la actualidad en la plaza de San Felipe Neri, posee un bonito museo
hasta el cual se dirigieron miembros de la Hermandad de Los Estudiantes para
conversar y poder disfrutar de las auténticas joyas del calzado que se pueden contemplar
en el mismo. Hay que destacar que este gremio barcelonés fue creado con anterioridad al de zapateros de
París, que pasa por ser el más antiguo de Europa.
Talla de San Crispín, patrón de los zapateros remendones, localizada en el Museo del Calzado |
en el 810º Aniversario de la constitución de la Cofradía de Sant Marc Evangelista, patrón de los Maestros Zapateros de Barcelona, en el interior de la Catedral |
D. Francisco Cuadrado, encargado del Museo junto a D. Igor Freijoó, prioste de la Hermandad de Los Estudiantes, en el recepción del Museo |
Además, en el Museo del Calzado de Barcelona pudimos contemplar la magnífica talla de San Crispín, que junto con su hermano San Crispiniano, eran patrones de los zapateros remendones, aquellos que reparaban los zapatos viejos y los vendían en las ferias. Los zapateros remendones instalaron sus tiendas en la calle de La Espadería de Barcelona, y de aquí viene que la nombrasen calle de la "Zapatería Vieja". En cambio, los zapateros de "nuevo" se instalaron en la calle de la Tapinería, donde se vendía el mejor calzado que existía. En cuanto a la imagen de San Marcos, titular de esta cofradía de zapateros, se encuentra en la catedral barcelonesa, donde en su altar se realiza el oficio solemne, música y reparto de flores, para honrar a sus santos patrones, como hace cientos de años lo hacían en la primitiva catedral románica, con motivo de su festividad.
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