Virgen del Pilar de la Catedral de Oviedo (Fotografía: Antonio Idalgo) |
Hoy
en Oviedo amanecía un día cerrado y oscuro, dejándonos ver esa gama de grises
que muy poco nos gustan y hacia tiempo que no veíamos por estos lugares, pero
tendría que cambiar, las lluvias con las que nos despertábamos darían una
tregua para que pudiésemos, en la plaza de la Catedral, comenzar un día de
festejos, todos ellos entorno a nuestra Madre, la Virgen del Pilar, Patrona de
Zaragoza, y de la Guardia Civil. Por ese motivo nos reuníamos en la Santa
Iglesia Basílica Catedral Metropolitana de San Salvador de Oviedo, a sus puerta
una Banda de Gaitas nos dejaba acordes de melodías asturianas y entre los
presentes el color más destacado era el verde. Todo estaba listo para celebrar
este día de la patrona de la Benemérita, comenzando por una Santa Misa a la que
asistirían todas las autoridades militares de la zona y el delegado de gobierno
de Asturias, D. Gabino de Lorenzo Ferrera, otras autoridades y la Hermandad de
Los Estudiantes de Oviedo.
Pasillo para la entrada en la Catedral (Fotografía: Antonio Idalgo) |
El Delegado de Gobierdo de Asturias y el Teniente Coronel, Jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Oviedo. (Fotografía: Antonio Idalgo) |
La
Catedral lucía esplendida, con un altar para la Virgen que era arropado por una
bandera de España, y dos guardias ataviados con el traje de gran gala. Y al
final de la misa un coro entono un himno que resonó por todas las esquinas de
la Catedral, y era para ti María, Nuestra Madre, porque nos abrazarnos a ese pilar
sagrado en los malos momentos, porque tu eres luz y guía en nuestro caminar,
porque tu eres Virgen Santa, eres Madre mía.
Altar de la Virgen del Pilar (Fotografía: Antonio Idalgo) |
Autoridades (Fotografía: Antonio Idalgo) |
Virgen Santa, Madre mía
luz hermosa, claro día
que la tierra
aragonesa
te dignaste visitar.
Este pueblo que te
adora
de tu amor favor
implora
y te aclama y te
bendice,
abrazado a tu Pilar.
Pilar sagrado, faro
esplendente,
rico presente de
caridad.
Pilar bendito, trono
de gloria,
Tú a la victoria nos
llevarás.
Cantad, cantad
himnos de honor y de
alabanza
a la Virgen del Pilar.
Pero
poco tubo que durar la tregua que las nubes, que encapotaban los cielos de
esta ciudad, soltasen el agua que acumulaban, con una lluvia fina pero continua
que desluciese este día. A muchos nos venia al recuerdo del sol y calor
que un año atrás, nos dejaba un día veraniego que nos hacía rebuscar en el
armario las prendas de un verano que solo podíamos encontrar en nuestros
recuerdos. Aunque los actos siguieron, y en el acuartelamiento del Rubín, sede
de la Comandancia de la Guardia Civil de Oviedo, no quisieron que unas gotas de
simple agua enturbiasen la fiesta de su patrona, y llego solemne la bandera, y
se paso revista, después se darían las condecoraciones, vendría el momento de
los discursos, y se acordarían de los caídos, sonaría su himno y como broche a
este día se realizaría un desfile.
Mienbros de la Hermandad de Los Estudiantes en el acuartelaminto del Rubín. |
Por
eso este día no se lo quieren perder ni los más pequeños, que se visten con el
traje de gran gala de la Guardia Civil, para celebrarlo con su padre y el resto
de las personas que estábamos allí. Porque tu María tienes un Pilar bendito, un
trono de Gloria y eres faro que nos guía en nuestro caminar.
Padre e hijo celebran el día de la Virgen del Pilar |
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