Emocionante adiós en la iglesia de La Corte al comunicador, cuyos restos reposan en Luarca
J. C. 07.03.2017
El solo de trompeta del tema central de "La Misión", de Ennio Morricone, llevó a lo más alto la emoción en la despedida al locutor radiofónico José Antonio Álvarez González, conocido como José Oso, oficiada ayer en la iglesia de La Corte a partir del mediodía.
La iglesia de la plaza de Feijoo se llenó de amigos, compañeros de profesión y miembros de la Cofradía de los Estudiantes que acudieron a testimoniar el afecto de quien -según se repetía en corros y pésames- era "una estupenda persona", a acompañar a su hija adolescente, Aurora Álvarez Lasarte, a la madre de ésta, Covadonga Lasarte y a los hermanos del locutor, Victoria, Araceli, Mario y Tetelo.
José, locutor y apasionado de la radio que escribió durante años la columna "En banda" en LA NUEVA ESPAÑA, falleció el pasado viernes en Oviedo a los 58 años de edad después de unos meses de enfermedad. Inició su larga trayectoria en los años ochenta, al calor de las concesiones privadas de radio, y mantuvo su presencia en las ondas desde entonces con un estilo que mezclaba lo coloquial con una escritura pensada y cuidada para ser leída por una voz agradable donde residía la misma cercanía con la que afrontaba el trato social.
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